Preguntas Frecuentes

¿Quién va al quiropráctico?

Bebés y niños

La etapa del nacimiento puede ser uno de los traumas mayores de la vida del ser humano. Es en este momento en que puede desarrollarse la primera subluxación vertebral, lo que puede interrumpir el buen desarrollo del niño. Es de suma importancia evaluar la columna vertebral de los bebés y niños para, de ser necesario, corregir subluxaciones que luego serán causantes del mal funcionamiento del cuerpo.

Deportistas

La quiropráctica funciona muy bien con el deportista, ya que mejora el funcionamiento del organismo, y le permite desarrollar su máximo potencial e incrementar su rendimiento. Además, con cuidados quiroprácticos continuados, el riesgo de sufrir una lesión es mucho menor.

Adultos

Insomnio, ansiedad, tensión muscular, jaquecas, problemas intestinales… son muchos de los efectos del estrés de la vida cotidiana, las malas posturas y los malos hábitos. La quiropráctica alivia éste estrés que sufre el organismo, devolviéndole su vitalidad y sensación de bienestar.

Embarazadas

La mujer embarazada puede sentir dolor lumbar o pélvico debido a la nueva posición que adopta su columna y pelvis. La quiropráctica puede aliviar estas tensiones y molestias ayudando al cuerpo a adaptarse mejor a los cambios tan bruscos que sufre la futura madre. Es además muy efectiva para ayudar a la madre a tener un embarazo pleno.

La tercera edad

Los ancianos tienden a sufrir en mayor medida los efectos de enfermedades crónicas y degenerativas. Los cuidados quiroprácticos pueden paliarlos y mejorar la calidad de vida. Aumentan la coordinación y el equilibrio, lo que disminuye el riesgo de caídas, y promueven la movilidad y flexibilidad de la columna y las extremidades.

 

¿Qué puedo esperar en mi primera visita?

Consulta y examen:

En la primera visita el doctor hablará con usted y le hará preguntas específicas para conocer su condición y problemas relacionados con su salud en general. A continuación se realizará un examen completo de su columna vertebral y/o de la parte afectada.

Análisis de pruebas:

Si posee pruebas de diagnóstico de la columna vertebral o pelvis, tales como radiografías o resonancias magnéticas, se analizarán las imágenes para determinar: el alineamiento o mal posicionamiento de las vértebras, anomalías congénitas, degeneración de los discos, artrosis, hernias discales, estenosis, posibles fracturas, patologías vertebrales, etc. Es recomendable traer cualquier prueba que tenga de su columna en la primera visita.

Ajuste quiropráctico:

El doctor le explicará cuales son los cuidados quiroprácticos más adecuados para su caso en particular. Por último le realizara un ajuste quiropráctico, el cual es totalmente indoloro, inocuo y carece totalmente de los efectos secundarios que suelen ir asociados hasta con los medicamentos aparentemente más leves; porque lejos de interferir como ellos con el funcionamiento natural del cuerpo, busca su restablecimiento.

 

¿Qué es el instrumento activador?

El activador es un instrumento quiropráctico manual que surge tras 25 años de estudios científicos biomecánicos realizados por la NASA. Consta de un sistema de ejes, resortes y tornillos que, sincrónicamente, disparan una fuerza controlada.

Es una técnica que permite corregir subluxaciones vertebrales y articulares ocasionadas por traumatismos, problemas congénitos, de nutrición, ortopédicos, malas posturas, etc. Estas subluxaciones producen dolor, contracturas musculares, espasmos y trastornos en el sistema nervioso y, por consecuencia, en órganos internos.

La utilización de esta técnica del activador se complementa perfectamente con otras y, en ocasiones, es la herramienta principal del tratamiento quiropráctico. Es una herramienta de ajuste de empuje manual.

El activador representa un nuevo concepto en fuerza liviana de suave impacto para el tratamiento sin dolor, diseñado de tal modo que, al aplicarlo, no causa estiramiento indeseado o fuerza en el paciente. Por el contrario, se obtiene mucho beneficio al actuar sobre los Centros Nerviosos Paravertebrales. A la hora de tratar un paciente con problemas neurológicos, de origen articular, es muy efectivo, provocando un ajuste energético de la zona afectada.

El activador sirve para reactivar tonos neuromusculares, ahí donde el cuerpo ha sufrido alguna alteración músculo-esquelético-neurológica. Es también usado para ajustes cervicales, torácicos, lumbares, así como íleum y extremidades. Su diseño, tipo y regulación del golpe, nos permite aplicarlo sin temor, ya que nunca causa fuerza o estiramiento indeseado.